MI ALMA
Una vez más
canté Al sufragio de lo imperfecto.
Me
fraccione en mil, pedazos que no eran propios
y tomaron
las riendas del taciturno obstáculo
que
observaba esa mañana que concurría exhaustiva
en busca de primordiales dilemas de conductas,
de
reciprocidad de ternura.
No logre
mantener el velo decadente e inofensivo del día.
Soñé cuando despertaba
llegando a la incertidumbre pactada que no es el paraíso
sino un canal inmaculado, cuando sin hablar el dialogo
es atravesado por la poesía.
No
condeno ni anhelo, pero los recurrentes paradigmas,
las intersecciones en el intercambio, el hallazgo fortuito,
es lo inevitable:
caer
nuevamente en descendencias y eficacias naturalizadas
dispuestas sí, entre tanto y entre cuanto, entre uno y …
Entre vos y mi alma.